Son normales en los recién nacidos pero después de los primeros meses algunos de ellos
se desvanecerán como señal de desarrollo neurológico.
Algunos de ellos son:
extienden los miembros de ese lado y se flexionan los del lado opuesto. Desaparece a finales del
primer trimestre.
- Reflejo de los puntos cardinales: estimulando la mejilla próxima a la boca, el niño dirige la boca y el rostro hacia el estímulo. Desaparece a partir de los tres meses.
- Reflejo de succión: el niño succiona cuando se introduce cualquier objeto en la boca. Desaparece a
finales del primer año.
- Reflejo de enderezamiento de la cabeza: al colocarle de cubito supino, endereza la cabeza.
Reflejo del abrazo de Moro: se provoca dejando caer al niño bruscamente hacia atrás, sujetándole al
caer. El niño echa los brazos hacia delante en posición de abrazo. Debe desaparecer a finales del
cuarto mes.
- Reflejo de prensión plantar y palmar: al contactar un objeto con la palma de la mano o la planta del pie, estas se contraen bruscamente. Desaparece hacia los cuatro meses.
- Reflejo de Babinski: al estimular la planta del pie, se produce la extensión de los dedos en abanico. Se considera normal hasta el año o los dos años de edad. Posteriormente significa lesión de la vía
piramidal.
- Reflejo de incurvación del tronco: un ligero rasguño en la región paravertebral produce incurvación del tronco hacia el lado estimulado. Va desapareciendo a partir de los tres meses.
- Reflejo de la escalera: adelantando al niño hacia el centro de la mesa, sube con los dos pies el escalón que constituye el borde de la mesa. Va desapareciendo a partir del primer mes.
- Reflejo de la marcha automática: consiste en movimientos primitivos de marcha con el cuerpo
inclinado hacia delante. Va agotándose poco a poco y desparece totalmente en el primer trimestre.
- Reflejo de reptación: apoyado sobre el vientre y con una resistencia en el pie, inicia movimientos
coordinados de brazos y piernas para reptar sobre el suelo. Desaparece hacia los cuatro meses.
·
- Reflejo de natación: sostenido horizontalmente sobre el estómago en el agua, hace movimientos
sincronizados de brazos y piernas. Desaparece hacia los seis meses.
- Parpadeo: la luz fuerte sobre los ojos hace que se cierren los párpados. No desaparece.
- Patelar: un golpe debajo de la rótula provoca una extensión de la pierna hacia delante. No desaparece.